Llega 'Mercenaries 2: World in Flames', de Pandemic. Y llega con cierta polémica. El videojuego estadounidense se desarrolla "en una Venezuela completamente destruida", y ha desatado críticas en el país que lo considera un proyecto de invasión.
El lanzamiento enfurecerá al sector oficialista y a los aliados del presidente venezolano, Hugo Chavez, que suele enfrentare con la Casa Blanca en encendidos discursos, y ha amenazado con cortar su importante suministro petrolero a Estados Unidos.
Pandemic, una división de Electronic Arts, resume su juego como los planes de "un tirano hambriento de poder usa el suministro petrolero de Venezuela y convierte al país en una zona de guerra", informa el corresponsal de Reuters Frank Jack Daniel.
Cuando el juego se anunció por primera vez en el 2006, legisladores oficialistas lo calificaron como un ejemplo de una campaña propagandística inspirada por Washington, que incluso pudiera preparar psicológicamente para una invasión verdadera.
"Toda la controversia en torno a esto es graciosa", dijo el portavoz de Electronic Arts Jeff Brown. "Al final del día tienes que recordar que es sólo un videojuego", agregs.
Algunas escenas del juego, que tiene lugar en el 2010, muestra a mercenarios de acento estadounidense asaltando instalaciones petroleras durante un sangriento golpe de un tirano llamado Ramón Solano.
"Es tiempo de que los venezolanos dejen de pagar por la codicia de intereses extranjeros, les haremos pagar por nuestro petróleo. De hoy en adelante todo el mundo pagará", dice el personaje antes de iniciar los combates en escenarios venezolanos.