Si hablamos de marcas como TomTom, Blaupunkt, Garmin o Sony con total seguridad las identificaremos como firmas de navegadores. En cambio, si mencionamos otras como Tele Atlas o Navteq probablemente nos serán más desconocidas. Mientras que las primeras son las encargadas de desarrollar los aparatos, las segundas se dedican a la creación de los mapas. Un tándem inseparable del que se benefician más de un millón de usuarios de navegadores en España.
Para conocer cómo funcionan Navteq y Tele Atlas conviene conocer su historia, puesto que los orígenes han condicionado en gran parte su desarrollo.
Tanto Navteq como Tele Atlas surgieron prácticamente al mismo tiempo -en la década de los 80- con el objetivo de desarrollar instrumentos de navegación personal, basados en la tecnología GPS. No obstante, mientras que la primera comenzó su andadura en San Francisco, Tele Atlas nació en Holanda.
Este hecho ha convertido a Navteq en la firma líder de navegación en Estados Unidos, mientras que Tele Atlas se caracteriza por tener un mayor número de adeptos en Europa. No obstante, ambas compañías han cartografiado numerosos continentes y decenas de países.
El proceso de creación de un mapa es un trabajo laborioso y complejo. En una primera fase lo más importante es la recogida de la mayor información posible sobre cada carretera. Para ello, ambas empresas cuentan con multitud de oficinas, repartidas por el mundo, que se encargan de analizar cerca de 50.000 fuentes de información -fotos aéreas, cartografía de las autoridades, información de los usuarios-.
Una vez recopilados los datos llega el turno de la comprobación. Para ello utilizan unos vehículos propios -dotados de sistemas de grabación- con los que analizan punto por punto cada una de las carreteras. Esta fase es crucial, puesto que las vías sufren modificaciones de forma continua, debido a las obras y a la introducción de nuevas intersecciones, señales y cambios de sentido.
Durante este proceso, Tele Atlas utiliza unos vehículos similares a unas autocaravanas que incorporan hasta seis cámaras digitales de grabación.
Bautizados como Mobile Mapping, estas autocaravanas detectan los cambios en las carreteras gracias a un sistema de recolección avanzado de imágenes.
Este dispositivo, que permite que las cámaras giren hasta 360 grados, no sólo capta cualquier variación del trazado sino que también analiza las diferentes señales, tanto horizontales como verticales. En esta fase de comprobación de cambios, cada compañía sigue una estrategia propia.
Mientras que Tele Atlas confía en parejas jóvenes sin ataduras que quieran trabajar a bordo del 'Mobile Mapping' y al mismo tiempo puedan conocer multitud de países, Navteq, por su parte, cuenta con un mayor número de oficinas, lo que permite a sus empleados realizar el recorrido en uno o dos días para que, una vez finalizado, puedan regresar a sus respectivos lugares de origen.
Toda la información recogida por estos vehículos se almacena en unos potentes discos duros, que posteriormente son enviados y volcados en las oficinas centrales.
A partir de entonces empieza una fase de validación donde se analiza el material grabado, se compara con la cartografía anterior y se aprueban los posibles cambios que hay que introducir.
Para ello, Tele Atlas envía toda la información a su centro de producción en India. Allí cerca de 700 ingenieros cartográficos y más de 100 desarrolladores de 'software' transforman las imágenes aprobadas en mapas. En esta fase los ingenieros recurren a la digitalización de los ejes de las calles -giros y cruces-. También insertan, por medio de procesos automáticos y manuales, atributos como los nombres de calles, el sentido del tráfico, los números de los portales, así como las maniobras restringidas.
Una vez terminado el producto, se generan los discos DVD que posteriormente se envían tanto a los proveedores como a los grandes distribuidores.
No obstante, aquí no finaliza el trabajo. Tanto Navteq como Tele Atlas realizan actualizaciones cada tres meses de sus mapas, de tal manera que los usuarios puedan adquirir los navegadores con la última cartografía desarrollada. En este sentido, Internet se ha convertido en una herramienta fundamental para estas compañías.
Mientras que algunos navegadores leen la información a través de soportes como el DVD, cada vez son más los dispositivos portátiles que incorporan los mapas en tarjetas de memoria.
Así, el usuario puede acudir a los diferentes sitios web de estas compañías y adquirir la última actualización de su navegador por un precio reducido.
Fuente: El Mundo.