Según la Comisión Australiana para el Consumo y la Competencia (ACCC en sus siglas en inglés) en 2005 el buscador anunció vínculos para empresas de venta de coches de segunda mano que en realidad no dirigían a los usuarios hacia lo que habían elegido, sino hacia el sitio Web de la revista 'Trading Post Australia'. Sorprendentemente, esta revista también vende bienes de segunda mano.
Rob Shilkin, portavoz de Google en Australia, asegura que esa demandada es un "ataque a todos los buscadores de Internet y las empresas australianas, tanto grandes como pequeñas, que los utilizan para conectar con los clientes de todo el mundo".
El Tribunal Federal de Sydney examinará el caso el 21 de agosto.
Fuente: El Mundo.