El consejero delegado de Apple, que superó hace tiempo un cáncer de páncreas, anunció este miércoles que estará de baja laboral hasta junio, debido a que su estado de salud es "más complejo de lo que pensaba", informaron medios financieros.
Jobs dijo, sin embargo, que planea permanecer involucrado en las principales decisiones estratégicas mientras dure su ausencia.
El cofundador de Apple agregó que el jefe operativo (director general), Tim Cook, se hará cargo de la gestión de la firma durante su ausencia.
Hace una semana, Jobs negó que su estado de salud, que le llevó a suspender su aparición en la feria MacWorld, se debiera a un proceso cancerígeno, y dijo en cambio que tenía un desequilibrio hormonal.
El propio Jobs lo explicó con estas palabras: "Como muchos sabéis, he perdido peso a lo largo de 2008. La razón ha sido un misterio para mí y para mis médicos (...). Afortunadamente, creen que han encontrado la causa: un desajuste hormonal que me ha 'robado' las proteínas que mi cuerpo necesita para estar sano".
Jobs intentaba contrarrestar así el efecto negativo que los rumores sobre su salud —persistentes en 2008— afectaran a la percepción del mercado sobre su capacidad para llevar las riendas de la firma.
También dijo entonces que sería "el primero en avisar al Consejo de Administración" cuando no pudiera cumplir con sus obligaciones como consejero delegado de Apple. Ha tardado menos de una semana en cumplir su promesa.
Steve Jobs, superviviente de un cáncer de páncreas
En 2004, Steve Jobs informó a sus empleados de que había sido operado de un tumor canceroso en el páncreas.
Por suerte, Jobs agregaba en el correo electrónico que envió a todos los trabajadores de Apple, "tenía una forma poco común de cáncer pancreático, que representa el 1% de los casos de cáncer de páncreas que se diagnostican al año y que puede curarse con cirugía si se diagnostica a tiempo".
El ejecutivo precisó en aquel momento que el cáncer de páncreas más común "actualmente no es curable y en general el paciente tiene una esperanza de vida de un año tras ser diagnosticado". Eso sí, aclaraba, "esta forma más común y terminal, gracias a Dios, no es la que yo tenía".steve