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2/20/2008

La tarjeta de crédito que dejará huella

Fuente: El Mundo.

La desconfianza y la sensación de inseguridad siguen siendo dos de los motivos que encuentran algunos consumidores para no usar la banca por Internet. Consciente de ello, la compañía alemana Siemens ha desarrollado una tarjeta que necesita de las huellas dactilares de su dueño para aprobar las operaciones que se hacen tanto en cajeros automáticos como por la red.

El objetivo es aumentar la seguridad de la banca 'on line' sin necesidad de utilizar 'hardware' ni 'software' adicional –basta con la tarjeta–, según explicó el martes Enrique Torres, director de Siemens IT Solutions and Services.

El sistema utiliza una tarjeta de un tamaño bastante similar al de una normal –algo más gruesa–, que almacena la información de las huellas dactilares y que sólo puede ser usada por su propietario. De este modo, cuando el cliente quiera realizar una operación deberá activar la tarjeta pasando su huella.

Una vez que la tarjeta esté en funcionamiento, hay que colocarla frente a la pantalla del ordenador –o del cajero automático–, para que mediante una serie de sensores ópticos incluidos en su reverso lea una imagen encriptada enviada por la entidad financiera. Durante el proceso no se requiere ningún contacto físico. Tras comprobar que los datos son correctos, se realiza la operación.

Existe además la posibilidad de registrar una huella determinada como señal de alarma en casos de coacción. De esta forma, cuando se utilice la huella de ese dedo concreto –la compañía lo llama 'panic finger'–, se simularía que se está realizando la operación, pero ésta no se efectuaría realmente. En su lugar se enviaría un aviso a las fuerzas de seguridad para informar del delito. Asimismo, el lector de huellas detecta el calor humano y no es capaz de funcionar sin él.

Negociaciones

Siemens hace explicado que hace poco comenzó a negociar en España con varias entidades financieras la comercialización de la tarjeta, denominada Internet ID-Card, aunque de momento no hay ningún acuerdo cerrado. La compañía no quiso citar a los posibles bancos interesados "por motivos de confidencialidad", aunque sí remarcó que la tecnología está ya totalmente lista para su puesta en funcionamiento.

Debido precisamente a que aún no se han sellado acuerdos, Siemens no ha precisado qué coste podría tener la tarjeta, ya que eso dependerá de la política comercial de cada entidad bancaria.

Torres explicó que no sería difícil que en un futuro la tarjeta se adaptara para funcionar también con teléfonos móviles o PDA. De momento, además de en España, la compañía sólo ha intentado su comercialización en Suiza y Alemania, países donde ya se están desarrollando pruebas piloto.